Así es el bike room de Gustav Iden
En el mundo del triatlón, no solo el talento natural y la dedicación definen a un campeón, sino también el entorno en el que perfecciona su rendimiento. Para Gustav Iden, su recién estrenada casa en Noruega no es solo un hogar, es también dónde entrena para volver a ser campeón del mundo. Su sala de entrenamiento, que él mismo llama «el bike room», es el epicentro de su preparación. Así lo cuenta en un reciente vídeo
El corazón del bike room
El bike room de Iden está equipado con las herramientas esenciales para un triatleta profesional. Allí destacan su flamante Giant Trinity con frenos de disco, un avance técnico que le permite optimizar su rendimiento en el ciclismo. Junto a la «cabra» de alta gama, encontramos su bicicleta de montaña y su fiel bicicleta de carretera.
«Es aquí donde construyo mi capacidad para enfrentar cualquier desafío en la carretera», comenta Gustav mientras muestra con orgullo su arsenal. Este espacio no es solo un lugar para entrenar, sino un laboratorio donde experimenta con técnicas y equipos para poder seguir aspirando a todo
Entrenamiento en condiciones extremas
El clima de Bergen, conocido por su frío y humedad, no es un obstáculo para el noruego. En su bike room, adapta sus entrenamientos para simular las condiciones más exigentes. ¿Cómo lo logra? Con un método inusual pero efectivo: un traje de pintor que utiliza para sesiones de calor.
«Este traje no respira nada, así que lo uso con lana debajo para generar una simulación de calor intensa». Esta técnica le permite aclimatarse incluso en los días más fríos, asegurándose de estar listo para competir en cualquier clima, desde los abrasadores hasta las lluvias torrenciales.
Tecnología y motivación en cada esquina
Una pantalla gigante, cortesía de Zwift, ocupa un lugar destacado en su bike room. Este regalo no solo es una herramienta de entretenimiento, sino también un aliado para entrenamientos virtuales, donde el de Giant puede pedalear con otros atletas o desafiarse a sí mismo en recorridos simulados.
En este espacio, la tecnología y la tradición se fusionan. «Me inspira ver lo que otros como Kristian Blummenfelt están logrando, y eso me impulsa a ir más allá de mis límites», dice mientras menciona la competitividad amistosa que comparte con su compatriota y compañero de equipo.
Un lugar lleno de visión y propósito
Para Gustav, su bike room no es solo un espacio físico, sino un símbolo para enfocarse. Cada detalle está pensado para maximizar su rendimiento: desde las bicicletas perfectamente alineadas hasta las condiciones de entrenamiento diseñadas para replicar escenarios extremos.
«Es aquí donde los campeones se construyen«. Este espacio es más que un lugar de entrenamiento; es un recordatorio de que la grandeza se forja en los momentos menos visibles, lejos del ruido de las multitudes y las cámaras.
Es solo el principio
El campeón del Mundo IRONMAN planea continuar transformando su templo de entrenamiento, añadiendo nuevos equipos y optimizando cada aspecto de su preparación. «Este es solo el principio. Quiero que mi bike room sea un espacio que refleje no solo mi pasión por el triatlón, sino también mi compromiso con ser el mejor»,
Para el noruego su bike room es mucho más que una sala de entrenamiento: es el lugar donde los sueños se convierten en realidad.
Foto portada santarastudios