Atentos al triatleta que destrozó a Jackson Laundry en la bici y la causa de su desfallecimiento
UN 2024 TOTALMENTE INESPERADO
La temporada 2024 se iniciaba con un Jackson Laundry cuyo objetivo principal era sumar puntos en los IRONMAN 70.3 para ascender en la clasificación general de la PTO y verse con opciones de ser uno de los triatletas con oportunidad de firmar el contrato con las T100 Triathlon de cara al 2025.
Sus tres buenas actuaciones en sus tres primeras carreras: en Oceanside (3º), St George (4º) y Chattanooga (2º), le hicieron cambiar sus planos y redebutar en la distancia reina (en sus siete años, tan solo había completado un IRONMAN ). Un nuevo debut en el exigente IRONMAN Lake Placid que le dejó con un buen sabor de boca y su primera clasificación para un Campeonato del Mundo IRONMAN. A partir de ahí, ensamblamos otros dos IRONMAN (Frankfurt 43º y Chattanooga 4º) y un IRONMAN 70.3 (Michigan 4º) antes de visitar Kona.
DEBUT DESCAFEINADO PERO CON GRANDES APRENDIZAJES
“Sufrí durante todo el día pero he aprendido mucho y estoy feliz de haberlo terminado ”. Así ha definido Jackson Laundry su actuación en Hawái , tras finalizar en 38º posición .
Y es que, a pesar de que el canadiense llegaba a la isla sin nada que perder, la carrera se le complicó desde antes de comenzar, cuando en el calentamiento en el agua, una medusa le picó en el labio apenas cinco minutos antes de empezar. Un imprevisto que no le impidió hacer una de sus mejores nataciones de siempre.
“Justo cinco minutos antes de salir, me picó una medusa en el labio y me dolió muchísimo. Por suerte, no me dio tiempo a pensar mucho porque enseguida se dio la salida. Hice una buena natación nadando con Matt Hanson o Peter Heemeryck , entre otros, y salí a tan solo 3:45 de cabeza de carrera«.
En cuanto a la bicicleta, el mejor sector de Jackson, todo iba sobre ruedas hasta que una auténtica bestia lo dejó fuera de juego .
“En la bicicleta me sentí con fuerza. Llegué a la subida de Hawii con 285 vatios y coronado con 292 . Es decir, la subida de Hawii la hice a unos 300 vatios . En ese punto, me pilló Cameron Wurf y aguanté con él hasta que llegó Trevor Foley , que iba a una potencia increíble, y en una pequeña subida en torno al kilómetro 130, me soltó sin piedad. A partir de ahí, la última hora promedié 220 vatios”.
Llegando el 27º a la segunda transición y con el orgullo mermado por Trevor Foley, Jackson Laundry tuvo en la humedad y el calor otro duro rival para una maratón en la que invirtió 3:40:32 para cruzar la línea de meta y completar su primer Mundial IRONMAN .
“La maratón fue mala desde el principio. Sentía que mi temperatura corporal estaba altísima, y con el hielo de los avituallamientos no podía bajarla. Empecé a 4:20 el kilómetro e iba muerto. Mi último kilómetro de la carrera a pie, cuando el día se nubló, fue el más rápido a las 4:15 . Ahí se ve cómo el calor fue el gran condicionante de mi carrera y lo importante que es entrenar en esas condiciones”.