Braden Currie: De Noosa a Kona, la preparación de un campeón
Braden Currie, triatleta veterano de Nueva Zelanda y quinto en en Kona (su mejor carrera allí), se encuentra en plena preparación para el Ironman de Kona. Este año, ha elegido Noosa como su base de entrenamiento, un lugar que describe como su » segundo hogar «. En un episodio reciente de su serie, Currie compartió un vistazo íntimo de su día a día mientras se alista para la carrera más importante del año.
Noosa: El escenario perfecto para entrenar
Currie no podría estar más satisfecho con su elección de Noosa para esta etapa clave de su preparación. Rodeado de un entorno épico , Currie menciona lo afortunado que se siente de tener acceso a instalaciones de primer nivel, incluyendo una piscina de 50 metros al aire libre , donde entrena junto a un grupo de jóvenes nadadores que lo inspiran a dar lo mejor de sí. mismo cada día. » Es increíble ver cómo esos chicos entrenan tan duro, a veces parece que no ganan ni un centavo, pero siempre están ahí, dándolo todo «, comenta. Estas sesiones de natación han sido fundamentales para mantenerse enfocado y motivado, destacando la influencia de su entrenador, JR , a quien atribuye gran parte de su dedicación al deporte.
Un estilo de vida equilibrado
Uno de los aspectos que más disfruta Currie en Noosa es el equilibrio que ha encontrado entre su exigente régimen de entrenamiento y un estilo de vida más relajado. Sus mañanas comienzan con una taza de café en la playa, una sesión de estiramientos y, si hay olas, una breve sesión de surf. » No tener que levantarse a las 5 am para entrenar es uno de los mayores lujos «, comenta con una sonrisa. Además, al entrenar con un equipo de natación que realiza sus sesiones por la tarde, Currie puede permitirse un comienzo de día más calmado.
Entrenamientos intensos para un desafío extremo
A medida que se acerca la fecha de Kona , los entrenamientos de Currie han aumentado en intensidad. Sus días incluyen desde sesiones de natación que lo dejan exhausto hasta arduos intervalos en bicicleta y carrera . En uno de los entrenamientos recientes, se le vio realizando repeticiones en cuestas , seguido de una carrera a ritmo de tempo en terreno llano. Estos esfuerzos forman parte de un plan cuidadosamente diseñado que incluye una combinación de volumen y alta intensidad , con un enfoque para minimizar el impacto físico para evitar el agotamiento.
Recuerdos de Kona y la evolución del triatlón
Currie también reflexiona sobre sus experiencias pasadas en el Ironman de Kona , recordando una carrera en la que compartió el liderazgo con atletas como Patrick Lange . » Corrimos juntos los primeros 25 kilómetros, pero yo estaba tan motivado que intenté empujar el ritmo sin darme cuenta de lo rápido que íbamos. Lo pagué caro después «, recuerda con una sonrisa. Currie también destaca cómo el deporte ha cambiado en los últimos años. Antes, los triatletas de élite solían mantenerse en los primeros lugares desde la natación hasta la carrera, pero ahora, con los avances en la ciencia deportiva , hay más atletas jóvenes que compiten al más alto nivel, algo que no se veía con tanta frecuencia en el pasado.
La recta final hacia Kona
Con apenas un mes para la gran cita en Hawái , Braden Currie continúa afinando su forma física y mental . Aunque Noosa le ha brindado la tranquilidad y el entorno perfecto para entrenar, pronto estará listo para trasladarse a la «Gran Isla» , donde buscará dejar su huella una vez más en la competición más prestigiosa del triatlón. » Gracias por seguir mi camino, nos vemos en Kona «, concluye
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Braden Currie, uno de los triatletas de élite más destacados, se encuentra en plena preparación para el Ironman de Kona. Este año, ha elegido Noosa como su base de entrenamiento, un lugar que describe como su » segundo hogar «. En un episodio reciente de su serie, Currie compartió un vistazo íntimo de su día a día mientras se alista para la carrera más importante del año.
Noosa: El escenario perfecto para entrenar
Currie no podría estar más satisfecho con su elección de Noosa para esta etapa clave de su preparación. Rodeado de un entorno épico , Currie menciona lo afortunado que se siente de tener acceso a instalaciones de primer nivel, incluyendo una piscina de 50 metros al aire libre , donde entrena junto a un grupo de jóvenes nadadores que lo inspiran a dar lo mejor de sí. mismo cada día. » Es increíble ver cómo esos chicos entrenan tan duro, a veces parece que no ganan ni un centavo, pero siempre están ahí, dándolo todo «, comenta. Estas sesiones de natación han sido fundamentales para mantenerse enfocado y motivado, destacando la influencia de su entrenador, a quien atribuye gran parte de su dedicación al deporte.
Un estilo de vida equilibrado
Uno de los aspectos que más disfruta Currie en Noosa es el equilibrio que ha encontrado entre su exigente régimen de entrenamiento y un estilo de vida más relajado. Sus mañanas comienzan con una taza de café en la playa, una sesión de estiramientos y, si hay olas, una breve sesión de surf. « No tener que levantarse a las 5 am para entrenar es uno de los mayores lujos «, comenta con una sonrisa. Además, al entrenar con un equipo de natación que realiza sus sesiones por la tarde, Currie puede permitirse un comienzo de día más calmado.
Entrenamientos intensos para un desafío extremo
A medida que se acerca la fecha de Kona , los entrenamientos de Currie han aumentado en intensidad. Sus días incluyen desde sesiones de natación que lo dejan exhausto hasta arduos intervalos en bicicleta y carrera . En uno de los entrenamientos recientes, se le vio realizando repeticiones en cuestas , seguido de una carrera a ritmo de tempo en terreno llano. Estos esfuerzos forman parte de un plan cuidadosamente diseñado que incluye una combinación de volumen y alta intensidad , con un enfoque para minimizar el impacto físico para evitar el agotamiento.
Recuerdos de Kona y la evolución del triatlón
Currie también reflexiona sobre sus experiencias pasadas en el Ironman de Kona , recordando una carrera en la que compartió el liderazgo con atletas como Patrick Lange . » Corrimos juntos los primeros 25 kilómetros, pero yo estaba tan motivado que intenté empujar el ritmo sin darme cuenta de lo rápido que íbamos. Lo pagué caro después «, recuerda con una sonrisa. Currie también destaca cómo el deporte ha cambiado en los últimos años. Antes, los triatletas de élite solían mantenerse en los primeros lugares desde la natación hasta la carrera, pero ahora, con los avances en la ciencia deportiva , hay más atletas jóvenes que compiten al más alto nivel, algo que no se veía con tanta frecuencia en el pasado.
La recta final hacia Kona
Con apenas un mes para la gran cita en Hawái , Braden Currie continúa afinando su forma física y mental. Aunque Noosa le ha brindado la tranquilidad y el entorno perfecto para entrenar, pronto estará listo para trasladarse a la «Gran Isla» , donde buscará dejar su huella una vez más en la competición más prestigiosa del triatlón. » Gracias por seguir mi camino, nos vemos en Kona «, concluye