Los planes de Alistair Brownlee para 2025 y sus consejos para vivir del triatlón
Alistair Brownlee, doble campeón olímpico de triatlón, ha compartido sus pensamientos sobre su trayectoria y los retos que le esperan tras su retiro del deporte profesional. En una reciente entrevista, el británico repasó su camino hacia la gloria olímpica, su decisión de alejarse de la alta competencia y sus planes para el futuro.
El camino al oro olímpico
Brownlee recordó su experiencia en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, donde finalizó en la duodécima posición. A pesar de no lograr una medalla, aquel resultado le hizo darse cuenta de que estaba cerca de ser el mejor. «Me di cuenta de que tenía el potencial para ganar si trabajaba en los detalles», afirmó. Convencido de su capacidad, dedicó los siguientes tres años a perfeccionar su rendimiento con un único objetivo en mente: ganar el oro en Londres 2012. Su enfoque en la consistencia y en la victoria en la mayoría de sus carreras lo llevó a conseguir el título olímpico en casa, un hito que repetiría en Río 2016.
Un adiós planificado
A diferencia de muchos deportistas que se ven forzados a retirarse por lesiones o falta de rendimiento, Brownlee quiso hacerlo en sus propios términos. «Quería dar el paso antes de que el cuerpo me obligara», afirmó. Durante los últimos años, fue preparando su transición, asegurándose de tener otros intereses y proyectos en los que enfocarse tras colgar el dorsal. «Siempre supe que no quería ser un atleta que sigue compitiendo cuando ya no disfruta ni rinde al máximo», agregó.
Explorando nuevos desafíos
Lejos de las tradicionales competiciones de triatlón, Brownlee ahora busca nuevos retos en el mundo de la resistencia. En lugar de competiciones emergentes como el Hyrox, su atención se centra en pruebas de ultra resistencia, como el ultra running, el ciclismo de larga distancia y las carreras de aventura. «Quiero seguir desafiándome a mí mismo, pero en formatos diferentes», explicó. «Siempre me ha atraído la idea de ponerme a prueba en entornos extremos, en los que la resistencia mental es tan importante como la física».
El dinero en el triatlón y la longevidad en el deporte
Brownlee también abordó la realidad económica del triatlón, un deporte que, según él, no genera las mismas ganancias que otras disciplinas. «El triatlón nunca ha sido un deporte con grandes premios, por lo que los atletas deben pensar más allá de la competición para generar ingresos», comentó. Asegura que una buena gestión financiera le permitió tener estabilidad a lo largo de su carrera y cree que los triatletas pueden aprovechar mejor las oportunidades de patrocinio y el potencial de las redes sociales para generar ingresos. «No todo es ganar carreras; construir una marca personal y conectar con la gente es clave», afirmó.
Además, habló sobre el impacto de los logros olímpicos en la mentalidad de los deportistas. Si bien alcanzar el oro le dio satisfacción y alivio, también le dejó la pregunta de «¿y ahora qué?«. Para él, la clave para mantenerse motivado fue estructurar su día a día con nuevos objetivos, centrándose en la mejora constante y no en cambios radicales.
A pesar de dejar atrás el alto rendimiento, Alistair Brownlee sigue en la búsqueda de la excelencia en cada nuevo desafío que emprende, demostrando que su pasión por la resistencia no termina con la competición profesional.