¿Mejorar la subida entrenando en llano es posible?

El debate de si es necesario hacer puertos o no para mejorar nuestro rendimiento cuesta arriba es habitual en las grupetas ciclistas. Es una pregunta que sale habitualmente y con la que tenemos que lidiar tanto los pro puertos como los que opinamos que no hace falta irse a la Sierra para afrontar luego puertos largos o encadenados.

Todo se reduce al W/Kg

¿Es posible hacer una marcha como la Quebrantahuesos sin haber hecho grandes desniveles entrenando? ¿Se puede afrontar con éxito una cicloturista con 2000-3000 metros de desnivel sin entrenamiento específico de puertos de montaña? La respuesta es un rotundo SÍ. Ya que al final entrenando lo que buscamos es mejorar nuestra relación potencia-kilogramo. Es decir, mejorar nuestros vatios en relación al peso.

Pongamos un ejemplo. Si un ciclista de 80 kilos mueve un FTP de 300 vatios tiene una relación de 3,75 w/kg. Mientras que si un ciclista de 68 kg tiene su FTP en 280 su relación es de 4,11 w/kg. Aquí el rey es esta relación. Por más vatios medios que mueva nuestro primer ciclista, el según irá más rápido. Al final en el mundo del ciclismo la clave está en sostener un esfuerzo y la relación de este con la masa que haya que desplazar.

Ojo, esto hay que tenerlo claro, ya que el W/Kg cobra importancia cuando la pendiente se empieza a poner seria, en especial a partir del 5%. Con pendientes más suaves o en el llano tiene más importancia la potencia absoluta o el CDA (coeficiente de aerodinámica). Pero tenemos que tener claro que cuando el asfalto se pone para arriba la gravedad cobra peso, nunca mejor dicho, y esa mágica relación de potencia y peso pasa a ser la principal ley sobre la bicicleta.

Por ello es de vital importancia entrenar esos esfuerzos sostenidos. Ya que cuando más alto sea el porcentaje de desnivel se quita más tiempo al cronómetro manteniendo la velocidad en vez de atacando o a golpe de demarraje. Entrenamientos a umbral o de «sweet spot» son muy interesantes para mejorar en este aspecto.

Entonces, ¿pasamos de ir a hacer puertos?

Pero no siempre es así y no siempre hay que evitar entrenar en puertos de montaña. Acudir a la sierra o a un alto tiene una serie de ventajas. Cuales, pues ahora os decimos alguna:

  • Puede hacer el entrenamiento más ameno. No solo por el recorrido, sino por variar el terreno, el paisaje, cambiar de lugar de rodaje…
  • Acostumbrar al cuerpo a un esfuerzo prolongado. No hay escapatorias. Si entrenamos hacía arriba la pendiente nos va a exigir siempre, si lo hacemos en llano podremos «escaquearnos» en caso de que no queramos exigirnos.
  • Los descensos también se entrenan. Esto puede que sea uno de los puntos más importantes y fundamentales como argumento para ir a entrenar a puertos de montaña, ya que si no solemos ir cuesta abajo la técnica de descenso se pierde y en caso de marchas cicloturistas con largos descensos, como la QH, saber bajar o por lo menos hacerlo de forma segura es fundamental.

Como podeis ver entrenar en llano no está reñido con subir bien. Tiene sus ventajas y al final todo se basa en el W/Kg. Aun así tenemos que tener claro cuando merece la pena ir a «hacer puertos» y cuando no.

Foto de Viktor Bystrov en Unsplash

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