Una interpretación de la norma fuera del Espíritu Olímpico

Si tuviésemos que definir Espíritu Olímpico sería algo así: «La actitud por la cual se demuestra la alegría por el esfuerzo, la entrega denodada y permanente complementado todo ello con principios morales».

Empiezo con esto, porque si algo destaca de los Juegos Olímpicos es ver ejemplos de atletas que ayudan a otros, que tienen gestos de deportividad y hasta en los de Tokio vimos a dos atletas que compartieron el oro en una disciplina. Todo esto choca con lo vivido por la maratoniana Elena Congost en la prueba reina del atletismo de fondo en los Juagos Paralímpicos de París.

Recordemos lo que pasó

Recta de meta. Ya en la alfombra azul. Se ve llegar a la paratleta Elena Congost y su guía Mia Coral. Al guía se le ve tocado, puede que con calambres o algún dolor muscular. A falta de pocos metros, con la medalla de bronce asegurada Elena suelta durante un par de segundos el lazo que le une a su guía y evita que este caiga al suelo. Le ayuda a evitar una caída y rápidamente coge la cuerda.

Dejamos el vídeo, porque eso de una imagen vale más que mil palabras es cierto.

Luego llegó la descalificación

Al cruzar la meta ambos celebrarón la medalla olímpica y la gesta realizada. Pero poco duró la alegría, ya que los jueces decidieron aplicar el artículo 7.9.5 del reglamento paralímpico. Un artículo que puede que tenga su razón de ser, pero en este caso, la rigidez choca con el espíritu olímpico del que hablábamos antes.

El artículo 7.9.5 enuncia lo siguiente: «En una carrera a pie, el atleta paralímpico y su guía deben mantenerse sujetos por una cuerda en todo momento: si alguno de los dos se suelta, el atleta será descalificado».

¿La aplicación por parte de los jueces es incorrecta? Puede que no, pero en un caso en el que es por evitar una caída, a falta de pocos metros y sin jugarse un puesto de honor en el momento puede que sea demasiado rígida la intepretación de la normativa.

Reacción de Elena Congost

Un gesto por parte del Comité Paralímpico Español

Desde la delegación española se interpuso una apelación a la descalificación de la atleta pero no llegó a buen puerto fue desestimada. Por ello el presidente del organismo nacional ha compartido en un comunicado que: «Considerando la magnífica actuación realizada hoy por Elena, plantearemos la concesión de una beca en la próxima reunión del panel de decisión que compartimos con el Consejo Superior de Deportes y la Federación Española de Deportes de Personas Ciegas».

Fotografía EFE

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