Cuatro mitos sobre la natación.

1. El estilo libre es el único que necesitas saber.

El Freestyle es el golpe más rápido y más eficiente, por lo que se utilizará la mayor parte del tiempo al completar una larga distancia. Sin embargo, cada triatleta debe tener un golpe de «seguridad» para usar cuando están cansados, necesita encontrar las boyas o limpiar sus gafas en una carrera. Además, el aprendizaje de otros trazos trabaja diferentes músculos y mantiene las cosas interesantes. Asi que deberiamos aprender a nadar en todos los estilos y saber dominarlos todos si queremos evitarnos más de un susto en algun triatlón

2. Se supone que debes contener la respiración bajo el agua.

Sostener la respiración causa una acumulación de dióxido de carbono y promueve una sensación de jadeo. En su lugar, exhale constantemente.

3. Los triatletas no deben molestarse con los ejercicios de patada.

Muy por el contrario: La patada es muy importante para iniciar la rotación del núcleo y el equilibrio de todo el cuerpo. Los triatletas deben practicar patadas con una cadencia baja para crear un golpe más fuerte y más eficiente con su parte superior del cuerpo. Esta claro si queremos avanzar más y mejor debemos aprender a tener una buena patada de natación.

4. Una vez aprenda a nadar, siempre vas a saber hacerlo.

Esto es, en parte, un falso mito. Si bien es cierto que saber nadar es algo que no se olvida del todo, es importante ponerlo en práctica, ya que su enseñanza consta normalmente de tres etapas: la de ambientación, que sirve para conocer ampliamente las características del agua, sus leyes y principios físicos; la de perfeccionamiento, en la que se suele aprender básicamente los cuatro estilos de la natación: crol, espalda, pecho y mariposa, y por último, la de entrenamiento, en la que se busca mejorar la aptitud física y la calidad de vida. Es en esta en la que se debe incidir y ser constante.

Y tranquilo que nadar en aguas abiertas cuando la controlamos es un placer, no nos va a comer ningún tiburón ni ningún pez raro.