Lo de Kristian Blummenfelt
Pues qué vamos a decir del noruego, pues que se marcó un carrerón. En una carrera marcada por el calor y la humedad y nuestros españoles muy lejos del podio Mola 10º, Alarza 12º y Noya 25º, el oro fue para Kristian con un tiempo de 1h 45m y 04s, que entró en meta llevándose las manos a la cabeza y acabó vomitando en cuclillas debido al esfuerzo, el calor y la paliza que se dio, después de nadar 1,5 kilómetros, 40 de bicicleta y corriendo bajo un sol abrasador 10 kilómetros.
El campeón olímpico, ha pasado largas temporadas en España, en concreto en Sierra Nevada junto a otros miembros del equipo de triatlón de Noruega, como Gustav Iden 8º en Tokio o Casper Stornes 11º, donde, si tenéis la oportunidad de ver su Strava, alucinareis con los volúmenes e intensidad de este equipo, casi más propio de triatletas de larga distancia. Al contrario que sus rivales tiene un físico muy robusto, técnica de carrera poco ortodoxa, tampoco es el más alto, ni su postura es la perfecta desde la biomecánica, pero tiene todo para ser un auténtico campeón y ya lo viene demostrando.
El noruego empezó en el triatlón cuando tenía 16 años después de que su entrenador de natación, Eivind Kartveit, le hablara de la disciplina, aunque es cierto que actualmente es el segmento que más se le atraganta.
Le acompañaron en el podio el jovencísimo británico Alex Yee, un triatleta que habrá que empezar a tomar muy en serio a 11 segundos y bronce para el neozelandés Hayden Wilde a 21 segundos.
Desde Trigloberos esperábamos ver a algún español en el podio pero al final no pudo ser, aplaudir a nuestros triatletas por darlo todo en una prueba tan dura y no nos queda más que aplaudir al «toro» Blummenfelt por su merecida victoria.