Mi primer año en el triatlón; aprender a correr, nadar y montar en bici

Me presento soy Rubén, una persona a la que le gusta estar activa, llevar una vida saludable practicando y disfrutando en el deporte y a la que le gusta tener ciertos retos deportivos asumibles para todo el mundo en el horizonte, algunos de estos “retos” han sido una carrera nocturna de 14km o una spartan, cómo veis retos que cualquier deportista popular podría completar, a fin de cuentas, soy una persona de lo más normal.

Espero que esta sea el comienzo de una serie de artículos en la que vaya hablando de mis experiencias en mi primer año entrenando a triatlón. En estos artículos encontrarás una visión personal de mis distintas vivencias, mis aprendizajes, errores cometidos y algunas anécdotas que espero puedan ayudarte si estas en ese mismo punto de querer empezar en este mundillo, o bien si quieres recordar y comparar como fueron tus comienzos en esto.

Parte 6

Cuando empiezas en esto del triatlón seguramente, por lo general, hayas corrido alguna vez, nadado y montado en bicicleta, aunque no sea de carretera pero… ¿Realmente tienes controladas todas las disciplinas? ¿Alguna mejor qué otra? ¿O eres un novato en todas? En mi caso, pensaba que sabía un poco de todas, pero realmente me he dado cuenta de que no tenía ni idea de ninguna.

Empecé en esto del triatlón siendo la natación una de las cosas que más me gustaban y que más había practicado anteriormente por mi cuenta y, por lo tanto, pensando que sería una de las que más disfrutaría y que menos me costaría adaptarme. ERROR. Nada más empezar a nadar con mis compañeros comprendí que mi técnica, así como mi velocidad eran horribles en la piscina, empezaron a corregirme varias cosas y tardé un tiempo en encontrar un ritmo al que pudiera aguantar cómodo nadando. Los entrenamientos de natación han sido con los que más he sufrido y más cansado he terminado.Lo bueno de todo esto es que me han fortalecido más de cabeza, algo muy importante en este deporte. A día de hoy, sigo siendo un paquete nadando, pero he mejorado mucho desde que empecé, ya tengo un ritmo cómodo, relativamente eficiente, disfruto la gran mayoría de los entrenamientos y lo más importante, todavía tengo mucho margen de mejora. Seguro que entrenándolo conseguiré ir mejorando cada vez más hasta encontrarme más seguro.

Con la natación, mi conclusión es, si como en mi caso no es tu fuerte, no desesperes ni tengas prisa. Sé que es muy fácil decirlo, pero los resultados tardan en llegar y no es lo mismo aprender algo de pequeño que cuando ya somos más mayores. Pero al final todo sale, no desesperes.

En el tema de la bici, yo venía de la montaña, que es una frase muy bonita, que lo que en realidad quiere decir es que tenía una bici de montaña con la cuál salía de vez en cuando y punto. Vamos, lo justo para no caerme de la bici y disfrutar con eso. Pues bien, recuerdo la primera vez que me dejaron una bici de carretera. Me sentí como si no tuviese ni idea de andar en bici. La leche, que diferencia, con esas ruedas tan estrechas no tenía ninguna seguridad. Recuerdo que en la primera rotonda casi me subo a la acera al sentirme tan torpe. Pero poco a poco, me fui viendo cada vez más cómodo durante la primera salida, aunque me seguía pareciendo que aquello era poco estable. Me intentaron enseñar a ir a rueda, pero al estrar más preocupado de no caerme que de otra cosa, ni por asomo iba a estar seguro yendo pegado a otra persona. Además, tenía muy poca cadencia, ya que en montaña se lleva menos y es a lo que yo estaba acostumbrado.

En resumen, que tampoco sabía como montar en bici. A día de hoy sigo aprendiendo como ir mejor a rueda, que como mis compañeros están muy fuertes es lo que me queda para intentar seguirles. También tengo que mejorar mucho en tema bajadas y tomar las curvas. Si empiezas en esto no te agobies, que son muchas cosas que ya irán saliendo y que desde luego no hay que hacerlas perfectas.

Por último, puede que estemos acostumbrados a correr, que sea un hábito que tenemos y que lo hagamos de continuo dos o tres días a la semana. Puede, incluso, que hayamos participado en varias carreras populares, que controlemos de distintos tipos de zapatillas y de pisadas, pero la carrera del triatlon, la cuál empieza una vez que te bajas de la bici, no tiene nada que ver con eso. Muchas veces es una carrera de supervivencia con las piernas muy cansadas y cargadas en la que luchas contra ti mismo porque has forzado demasiado en el sectór de la bicicleta. Una carrera en la que, a parte de piernas, tienes que tirar continuamente de cabeza y, aunque como todo se puede entrenar, en días que toque hacer transiciones, las sensaciones de cada día van a ser distintas. Ten esto en mente para estar lo más preparado posible.

Primer Duatlón de equipo

Después de todo esto, lo que tengo que decir es que tengas paciencia, este deporte tiene tres disciplinas distintas, cuatro si contamos la fuerza, esa gran olvidada que tanto nos ayuda a progresar en lo demás. No se puede ser bueno en todo, ni tener todo controlado, son muchos factores y muchas cosas por aprender y por mucho que pienses que tienes algo controlado o que puede ser sencillo para tí, a la hora de la verdad, todos siempre podemos seguir aprendiendo y enseñarnos los unos a los otros.

Si quieres leer la parte 5 aquí la tienes

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *